Lava y cepilla a tu gato persa con perfección

La gloriosa capa de pelos del gato persa ha llamado la atención a más de un amante de los felinos, pero el pelo es un amo exigente. Descuidarlo durante unos días significa que la belleza se puede convertir en una aglomeración evidente de nudos. Un dueño dedicado debe estar dispuesto a mantenerse siempre vigilante para mantener a su mascota persa tan sedosa como la seda y suave como el algodón. Vale la pena el esfuerzo.

aseo gato persaCepillado. El pelaje del gato persa es “antinatural”, ya que no aparece en los gatos realmente salvajes. Es hermoso, pero difícil de mantener, incluso con la auto-limpieza del gato más exigente. Lo ideal es velar por su aseo todos los días, pero si no es posible, igualmente se debe prestar atención a la formación de enredos y nudos, porque no es sólo es desagradable visualmente, sino peligroso, porque la piel de abajo se puede infectar.

Comienza con el aseo de tu gato persa desde que es todavía un gatico, sólo para acostumbrarlo a la idea. Algunos criadores comienzan cuando los pequeños gatitos tienen sólo 3 semanas de edad. Si tu gato ha sido manipulado amablemente desde una edad temprana, debería comportarse bastante tranquilo cuando se trata del aseo. Una sesión de cepillado muy exhaustiva debe tomar unos 15 minutos. Ese también es un buen momento para buscar posibles lesiones, abrasiones, llagas o incluso pulgas.

Un peine de metal puede parecer un implemento de aseo muy sencillo, pero realmente es similar a una varita mágica. Unos cuantos cepillazos hábiles a diario protegen a tu gato contra las esteras, los enredos y nudos. Comienza con un peine de dientes anchos para ayudar a aflojar los grandes enredos, a continuación, procede con el peine de dientes finos para peinar los nudos más pequeños y la cara. Mantente alejado de los peines de nylon, generan electricidad estática. No ignores el pelo de las axilas y detrás de las orejas, porque es más fino que en otras áreas y más propenso a los enredos. No te olvides de sus piernas y el vientre.

Cuando descubras un nudo, simplemente sepáralo para peinarlo, no tires de él porque sólo vas a hacer daño al gato y dejar un parche desnudo de piel. Si es necesario, puedes utilizar una herramienta dematting. Estas herramientas vienen en una variedad de diseños, pero todas están hechas para eliminar esteras sin afectar la longitud del pelo. Un modelo popular tiene cuchillas afiladas, pero empotradas, para cortar a través de los nudos, con dientes transversales para peinar y alisar el pelo. Algunos modelos tienen pequeños dientes en las cuchillas que ayudan a recoger el pelo suelto. Tú puedes probar varios modelos antes de encontrar el que funciona mejor para ti. Piensa que utilizar las tijeras puede ser peligroso, un movimiento del gato en la dirección equivocada podría terminar lesionando su piel que es extremadamente delgada y se infecta con mucha facilidad. Otra razón para no usar las tijeras es simple estética. No sólo van a dejar feos agujeros en el pelaje de tu gato, sino que recortarle el pelo de forma desigual hará más difícil recortárselo en el futuro.

Si el nudo es simplemente inflexible, puedes cortarlo con unas tijeras pequeñas para pelos de nariz, pero primero desliza el peine debajo del nudo, entre el enredo y la piel del gato. Ten cuidado porque obviamente no querrás cortar su piel, que es especialmente sensible y dolorida debajo de los enredos. En algunos casos, la formación de nudos se puede prevenir mediante la aplicación de una preparación con polvo, no siempre funciona, pero el polvo absorbe parte de la grasa y sin duda vale la pena darle una oportunidad. Por cierto el polvo para este aseo no es polvo para bebés, es importante utilizar el producto correcto, que se puede comprar en las tiendas de abastecimiento para aseo, las tiendas de suministros para animales de compañía e incluso por internet.

Otra herramienta necesaria es un cepillo de cerdas naturales y duras, pero su uso principal es para esponjar la capa de pelos después de peinarlo. El peine de metal hace todo el trabajo duro, después se debe cepillar vigorosamente contra el crecimiento del pelo. Esto lo pondrá suave, esponjoso y estimulará el crecimiento de las capas nuevas. En caso de querer exhibir a tu gato, viene muy bien
un par de tijeras curvas para cortar el exceso de pelos, pero esto es diferente de cortar los nudos.
Hacer todo lo recomendado con regularidad y amor, hará que tu gato persa considere sus sesiones de aseo personal como otra manera de ser el centro de atención, que a fin de cuentas es lo que realmente quiere.

Tiempo de baño. Los gatos de pelo largo realmente se benefician con el baño una o dos veces al mes y mientras más sean bañados, más se acostumbran a hacerlo. Pero primero hay que cepillar bien la capa interna de pelos, de lo contrario, todos los nudos se aprietan y se vuelven inseparables. Antes de empezar, asegúrate de que la zona de baño sea cálida para mayor comodidad del gato. Debido a que los gatos no tienen una relación natural con el agua, tendrás que ser firme y suave a la vez. Habla en un tono tranquilo y relajante.

Antes de empezar, cerciórate de que tienes todos los materiales que necesitas a la mano y todo lo demás fuera del camino. La última cosa que necesitas es tratar de sostener a un gato chillón con una mano mientras tratas de alcanzar el champú que está en el otro lado de la cocina. Tu gato mojado escapará y destruirá todo a su paso.

La forma más sencilla para bañar al gato es llenar un recipiente o lavadero, con 4 o 5 pulgadas de agua tibia. Coloca un tapete en el fondo de la pileta para darle a tu gato un poco de tracción. La mayoría de los gatos aceptan este procedimiento bastante bien, pero si el tuyo intenta rascarse, sostenlo firmemente por la piel del cuello. Humedécele el pelo y a continuación, haz espuma por todas partes con un champú específico para gatos.

Los persas tienden a ser un poco grasientos, por lo que algunas personas pre-bañan a estos gatos con un producto desengrasante. Si necesitas desengrasar el pelaje de tu gato, hazlo antes de aplicar el champú. Generalmente, puedes aplicar el desengrasante directamente al pelo, aunque algunas personas prefieren diluirlo primero. En cualquier caso, añade agua y haz espuma a fondo. Luego enjuágalo completamente.

Otra forma de hacer esto es un proceso simple llamado ” pelo flotante “. Consiste en poner al gato bajo agua, exceptuando su cabeza por supuesto, para que las capas de pelo se levanten, permitiendo que el agua penetre bien hasta la piel. Luego se deja que el gato salga. El proceso se debe repetir varias veces, consecutivamente.

Los desengrasantes hacen que la capa quede esponjosa, pero pueden robarse parte de los aceites esenciales, así que tendrás que añadir un tratamiento de aceites antes de que el pelo se dañe de forma permanente. Para ello, se puede usar un tratamiento de aceite tibio para animales domésticos o un champú especialmente formulado.

Después del pre-baño con un desengrasante, es el momento de aplicarle champú al gato. Por lo general, funciona mejor mezclar primero el champú con agua y luego verter la mezcla sobre el gato. Si se aplica el champú no diluido directamente, puede ser muy difícil de eliminar.

El color también importa. Si tienes un persa blanco, elige un champú con brillo o un agente “azulado”. Asegúrate de utilizar un champú para gatos diseñado para el color del pelaje en cuestión, así podrás obtener el efecto óptimo. A los gatos negros, en cambio, les va mejor con un champú de oscurecimiento. Además si se tiene la intención de exhibirlos, deben mantenerse fuera de la luz solar intensa, ya que literalmente el sol brillante hace desaparecer el color negro. Asimismo, no les sienta bien el secado excesivo. Cada color básico tiene un champú diseñado para sacar al máximo su potencial.

Lavarle la cara puede ser particularmente difícil. Lo mejor es mezclar un poco de champú con un poco de agua y lavar con cuidado, usando un cepillo de dientes suaves alrededor de los ojos y la nariz. Puedes seguir al champú con una crema de enjuague, si los deseas.

Por último, se enjuaga al gato con mucho cuidado y no te olvides de la parte inferior de su cuerpo. Enjuagarlo tomará por lo menos el doble de tiempo que para bañarlo. Luego sécalo con una toalla. Los peluqueros suelen secar a los gatos con secador a una temperatura baja, pero los dueños de mascotas en casa pueden dejarlos secar al aire libre en un ambiente sin corrientes de aire. Si vas a usar un secador, dirige el flujo de aire hacia atrás contra la disposición de los pelos en la parte superior del cuerpo. A continuación, hazlo a lo largo de los laterales, las patas delanteras y el cuello. Seca completamente cada parte antes de pasar a la siguiente sección. La cola, el vientre y las patas traseras deben dejarse de últimas, los gatos le tienen poca tolerancia a que las personas manipulen esas áreas. Si el persa va a mostrarse irritado, lo mejor es que sea al final de la sesión y no al principio.